El triunfo
Él tocó la primera nota y yo las siguientes; entre ambos
compusimos mi mejor obra. Después, desapareció por la ventana y nunca más
volvió.
¿Si él no hubiera posado sus patas sobre esas teclas hubiera creado esa obra en concreto? Tal vez...
¿Si él no hubiera posado sus patas sobre esas teclas hubiera creado esa obra en concreto? Tal vez...
Solo se
necesita una nota, una palabra, una imagen para alcanzar el triunfo, y ese
principio no siempre es nuestro.
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